Compás de espera.
Esta entrada quiere ser un recordatorio y también un tiempo añadido a la propuesta planteada en la entrada anterior : Las novelas “de piscina”. Mi intención es dar margen para una mayor participación que nos permita conocer a todos cuales han sido vuestras lecturas veraniegas, en la línea de los comentarios ya realizados. Así podemos aprender unos de otros y recibir sugerencias que nos acerquen a libros en los que no habríamos pensado, un poco como ocurre con nuestro club de lectura.
Para estimular las colaboraciones he pensado sortear un libro entre todos los participantes. Se lo haré llegar al ganador o ganadora en el primer encuentro que compartamos y, para que el sorteo sea bien trasparente, se llevará a cabo en la próxima reunión del consejo de la Púa al que se invitará a un miembro externo del grupo para que haga las veces de notario.
Quiero hacer coincidir esta iniciativa con el segundo aniversario de La PuaWeb y, consiguientemente, de la sección de Literatura de la que me he ocupado durante este tiempo. Ha sido muy satisfactorio aunque, si os digo la verdad, lo mejor ha sido la dinámica que se ha establecido con vosotros, tanto si me enviabais una entrada para publicar como si comentabais alguna de las mías. Este premio en forma de libro quiere expresaros mi agradecimiento.
Y acabo en línea con en la entrada anterior ¡sigamos leyendo!
- Teresa Martín y Jorge Luís Borges (III) - sábado, 23 de septiembre de 2023
- Teresa Martín y Jorge Luis Borges (II) - sábado, 24 de junio de 2023
- Teresa Martin y Jorge Luis Borges (I) - sábado, 20 de mayo de 2023
Maite, mágnifico pase negro!!
Para mi es estupendo porque así me da tiempo a responderte y, además, optar al premio!!
Ya te comenté que me había quedado con las ganas, así que esta hábil prórroga tuya me va a dar la oportunidad.
Este verano, afortunadamente, he paseado mucho los libros que me acompañaban. Los he mareado de lo lindo.
Domingo Villar, como sabes, fue de los primeros en caer. Tirado al sol en las playas del sur del Peloponeso “Ojos de Agua” me supo a gloria.
Alli tambien leí el que va a ser mi “novela de piscina”. Es de un escritor novel, bueno y catalán! Ja,ja,ja. De Collblanc para más señas, allí creció como hijo del dueño de un bar de comidas. El libro, delicioso, es una mezcla de novela, estudio sociológico de la Barcelona de los 90 y diario personal, que me parece muy recomendable. Ah!… ¡se me olvidaba! Se llama “Collado. La maldición de una casa de comidas” de Carles Armengol.
Y en Menorca leí un libro que me regaló un amigo bilbaino, porque buena parte de sus capítulos hablan de la isla y esta escrito entero allí. “Lluvia Roja” del holandés Cees Noteboom, varias veces propuesto para el Nobel, que tiene casa en San Lluís y vive largas temporadas allí desde hace mas de 40 años! A mi me parce un autor desigual, pero cuando la clava roza la genialidad. Lo mismo le ocurre a este libro. Para los enamorados de Menorca bastante recomendable.
Y acabo. Te diré que es difícil mojarse en lo de los libros de piscina. Ja, ja ,ja. No, en serio, creo que la ligereza no está reñida con la calidad. Pero, ojo!, hay que evitar la moralla. Ja,ja,ja.
Hola Pedro ¡bienvenido a la segunda hornada!
Me encantan tus recomendaciones, ya lo sabes, y me alegra que una de las mías te “supiera a gloria” aunque creo que el Peloponeso debió ayudar mucho.
Me parece que muchas lecturas veraniegas se eligen por el entorno (previamente o durante), es un dato que no planteé pero tus dos otros libros abren una nueva línea de coloquio ¿no te parece?
Besos.
Aunque creo que fui el primero en contestar y por tanto merecedor descarado del premio ( ni sorteo ni leches…que hubiesen espabilado) renuevo mis votos y mi aplauso por todo el placer que me has proporcionado en estos años.
No sabes cómo te necesito y te disfruto.
No desfallezcas aunque nos dosifiques más tu preciado tiempo.
Tus artículos serán más deseados.
Un beso enorme
Hola de nuevo, Pepe. tienes razón, mereces el premio aunque solo sea por la constancia ¡a ver como lo arreglamos!
Siempre es un placer escribir para personas como tú y mis desfallecimientos son puntuales, ¡me compensan nuestros intercambios presenciales o virtuales y espero con ansias los próximos!
Muchos besos-